martes, 8 de febrero de 2011

INTRODUCCIÓN Y FUNDAMENTACIÓN

A finales del año 2005, los datos manejados por los profesionales sanitarios y de los equipos técnicos del Centro Penitenciario de Teixeiro señalaban que algo más de las dos terceras partes de la población ingresada eran o habían sido consumidores de sustancias tóxicas.
Paralelamente, la demanda de acceso a programas de drogodependencias en el interior del centro se habían incrementado sustancialmente.
Se hacía necesario, por tanto, reactivar los programas de intervención con personas drogodependientes en el C.P. de Teixeiro. Con este fin, el Consejo de Dirección, conforme a lo establecido en la Circular 17/2005, de 15 de diciembre, sobre programas de intervención en materia de drogas en Instituciones Penitenciarias, acordó la puesta en funcionamiento de una Unidad Terapéutica y Educativa – UTE - (“módulo terapéutico”), y su ubicación en el módulo residencial nº 6 del establecimiento.

Las fases preliminares de configuración del equipo Interdisciplinar y de diseño del proyecto se iniciaron a finales de enero de 2006, siguiendo el modelo, la filosofía, la estructura organizativa y las normas de funcionamiento de UTE delineadas por el equipo Interdisciplinar de la
UTE del C.P. de Villabona (Asturias).
Finalmente, la UTE “Concepción Arenal” se pone en marcha el 22 de marzo de 2006.
La Unidad Terapéutica y Educativa representa un modelo alternativo de intervención dentro de la institución penitenciaria, dado que aúna todos los recursos humanos de la misma en un equipo Interdisciplinar donde se integran todos los estamentos profesionales.

Pero la UTE es además un modelo alternativo “a” la prisión tradicional pero “en” la propia prisión, haciendo posible el mandato del artículo 25.2 de la Constitución Española en cuanto a los fines de las penas privativas de libertad: la reeducación y reinserción social. Este modelo se asienta sobre los siguientes pilares:
1. Dotarse de un espacio de residencia e intervención absolutamente saneado, ordenado, limpio, bien dotado en cuanto a infraestructuras básicas (habitaciones, comedor, salas de reuniones, salas de lectura, talleres, gimnasio y áreas deportivas, cafetería, despachos), en definitiva no carcelario –normalizado si se quiere-, donde se pueda tener una convivencia sin violencia, sin drogas, sin grupos de presión, y donde se pueda realizar la intervención socioeducativa.
2. Un equipo interdisciplinar de profesionales, que ya lo son del centro penitenciario, pero que voluntariamente desean implicarse en el proyecto. En este equipo todos los profesionales tienen la misma importancia y jerarquía (aunque evidentemente haya unos coordinadores). Rompe además, consciente y decididamente, con las divisiones establecidas por la ideología profesionalista y la agremiación consiguiente, especialmente con la diferenciación penitenciaria clásica vigilancia/tratamiento. Está constituido en Teixeiro, entre otros por: educadoras, psicólogo, monitores deportivos y ocupacionales, funcionarios de vigilancia (tutores o educadores de hecho), trabajador social, jurista, médica, enfermera, etc. Los profesionales realizan la intervención propia de su especialidad –se establecen diferentes áreas de intervención: ocupacional-formativa, social, médica, psicológica, educativa, deportiva-, pero todos participan en la vida del día a día del módulo de forma integrada e integral. Se reúnen a diario para coordinarse y semanalmente en junta de modo más formal, y toman de forma consensuada las decisiones sobre programas de intervención en general (incluyendo permisos, revisiones de grado, nuevos ingresos, bajas del módulo, etc.).
3. Frente al modelo habitual en la institución basado en la distancia jerárquica como forma de autoridad profesional y la actuación individualizada e individualista, este no se reduce a la intervención sobre el usuario, sino que se amplía al contexto ambiental, la propia prisión, incidiendo sobre la subcultura carcelaria de los usuarios y de los profesionales. Así, se promueve y de hecho se instaura una cultura y una forma de trabajo de cogestión o corresponsabilidad entre los dos colectivos que protagonizan la vida penitenciaria, esto es, los “internos” y los profesionales penitenciarios.
4. Pedagogía principalmente basada más en la adquisición de hábitos, pautas de comportamiento y pensamiento y actitudes, a través de la convivencia ordenada, la reflexión y el diálogo en grupo, el esfuerzo personal y colectivo, que en la transmisión simple de información y formación de modo unidireccional profesional-usuario. Esto no implica que no se realice tal labor formativa en las diversas áreas antes señaladas (psicológica, médica, social, laboral, etc.), imprescindible para adquirir los rudimentos, destrezas y conocimientos necesarios para facilitar la superación de la conducta adictiva y la participación libre y activa en el medio social de referencia (ampliar el código tan restringido que maneja quien ha visto mediatizado su proceso vital por la adicción a los tóxicos). La intervención que con cada usuario se realice está sometida a discusión, clarificación, e incluso negociación en ocasiones, con cada usuario individualmente, y también en el grupo si él lo desea.
5. No se excluye a ningún usuario, sea cual sea su condena, su pasado penitenciario, su grado de tratamiento. El acceso y el abandono son voluntarios y sólo se exige motivación y buena disposición. Se procura ser serios en el cumplimiento de normas de convivencia y realización de tareas, pero siempre se supervisa o confronta con mediadores (apoyos), grupo y el propio residente individual.
6. Apertura total del módulo al exterior, para lo cual: se potencia la participación de asociaciones y entidades diversas; se implica directamente a los recursos y servicios sociales extrapenitenciarios (centros de drogodependencias, centros de formación, casas de acogida, etc.) -todos ellos visitan periódicamente el módulo, participan en la intervención, y realizan conjuntamente con el equipo los programas de derivación a tales servicios-; se promueve que la familia, amigos, y cualesquiera otras personas, instituciones y organizaciones que sean parte de la red social del residente se impliquen y participen activamente en la intervención con el equipo, para lo cual se permiten las visitas periódicas dentro del módulo, se realizan jornadas de convivencia y se establecen canales de comunicación continuada; se realiza una labor informativa-formativa con centros educativos de la comunidad, tanto de secundaria como universitarios, para lo cual mediadores (apoyos) y profesionales acuden a coloquios, jornadas y cursos, y se abre la puerta para que estos colectivos visiten el módulo. Todo esto implica una ingente labor de información, gestión, coordinación, etc. con recursos sociales, empresas, familiares, etc. con el objetivo declarado de mantener, estimular, regenerar, crear en ocasiones, la red social (cercana y comunitaria) de cada usuario, lo cual es básico para una futura reinserción. Una vez derivados a los recursos y servicios extrapenitenciarios se mantiene un seguimiento y apoyo en coordinación con estos centros.
Después de dos años de funcionamiento, se puede afirmar que la UTE del C.P. de Teixeiro está plenamente consolidada en la realidad del centro e incardinada como recurso de intervención en materia de drogodependencias con los diversos recursos extrapenitenciarios de la provincia de A Coruña.
se pretende la expansión real del modelo UTE al módulo 5 del establecimiento, que hasta el momento era utilizado como de preacceso y de expulsión temporal a la UTE, aunque formalmente fuera parte de ella. También se quiere abrir un piso de inserción cedido por el Ayuntamiento de A Coruña, en colaboración con el Comité Antisida de A Coruña (CASCO) como complemento necesario para la reinserción social de aquellas personas que no cuentan con un medio convivencial adecuado en el exterior, y la implantación de un programa de acompañamiento para la inserción dirigido a todas las personas que salen de la UTE y se reincorporan a su entorno habitual, en coordinación con las entidades extrapenitenciarias adecuadas para la consolidación del proceso de deshabituación, rehabilitación y reinserción iniciado en la UTE.

lunes, 7 de febrero de 2011

UTE EN TEIXEIRO

La Unidad Terapéutica y Educativa representa un modelo alternativo de intervención dentro de la institución penitenciaria, un modelo alternativo “a” la prisión tradicional pero “en” la propia prisión, en la que aunamos todos los recursos humanos del centro penitenciario en un equipo interdisciplinar donde se integran todos los estamentos profesionales, con especial relevancia de los funcionarios de vigilancia, con alta cualificación formativa y gran conocimiento del medio, haciendo posible el mandato del artículo 25.2 de la Constitución Española en cuanto a los fines de las penas privativas de libertad: la reeducación y reinserción social.

lunes, 31 de enero de 2011

OBJETIVOS DE LA UTE

• Desintoxicación y deshabituación de la drogodependencia.
• Integración y estabilización de las personas con larga trayectoria toxicofílica en programas de reducción de daños.
• Adquisición de mecanismos y actitudes que ayuden a reforzar su proceso personal de cambio y el abandono de conductas delictivas.
• Interiorización de hábitos y habilidades sociales que permitan la adopción de un estilo de vida saludable.
• Educar en valores y actitudes prosociales.
• Promover una positiva utilización del tiempo libre.
• Iniciar o reiniciar estudios inacabados.
• Formación ocupacional y profesional que facilite la reincorporación laboral una vez en libertad.
• Trabajar la comunicación y las relaciones positivas entre las personas.
• Fomentar aspectos de crecimiento personal como el autocontrol, la autoestima, la sinceridad y la responsabilidad.
• Incentivar las relaciones familiares positivas.

domingo, 30 de enero de 2011

UTE: ÁREA OCUPACIONAL Y SOCIOCULTURAL

Esta área se enfoca al desarrollo de habilidades manuales e intelectuales, a la canalización de actividades, a la creación de hábitos de desarrollo personal como la lectura, el diálogo, la escucha, la estructuración de la utilización del ocio y el tiempo libre, la participación activa en la producción cultural, etc.
Todo ello se plasmará en la realización de actividades como:
•Talleres ocupacionales (cuero, pintura, cerámica, espejos, marquetería…)
• Taller de prensa.
• Taller de animación a la lectura.
• Actividades recreativas.
• Otras actividades.

sábado, 29 de enero de 2011

UTE: ÁREA DE FORMACIÓN PROFESIONAL

Permanentemente, y preferentemente en horario de tarde, de ofertará a los residentes el acceso a cursos homologados de Formación Profesional que les permitan ir haciéndose con un currículum personal útil y válido para su futura reincorporación sociolaboral una vez en libertad.
Se procurará la colaboración con entidades públicas y privadas del exterior para ampliar la oferta de cursos formativos tanto en el interior de la UTE como en centros extrapenitenciarios.